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Adiós Muñequita Ruda.

Y otra vez lloro,
esta vez por una despedida,
que sin tenerla prevista,
rompe mi corazón.

Sucede esto porque he muerto,
he fallecido ante una mujer,
porque mi corazón quedó corto
y mi amistad no la pudo satisfacer.

Ha sido una gran pérdida,
y ha sido un gran dolor,
porque ante todo,
ha sido indiferente a mi amor.

Adiós Muñequita Ruda, adiós desde hoy, adiós.

Me retiro sin añorar
porque todo lo que tuve lo
entregué para ti sin esperar
algo a cambio, porque yo no
pido ni exijo algo por lo
que de corazón otorgo.

Llegué a tu vida sin que lo pidieras
y me retiro ahora que tú lo exiges.

Insatisfecho me voy y con una gran desepción,
no por haber fallado en mi amistad, sino
porque al verte por ultima vez has creido
y pensado que he obrado con malintención.

Deseo comprender el porqué de lo sucedido,
pero sin lograrlo me retiro de tu vida, dolido.

Explicaciones pedí y hasta una disculpa logré,
pero al final apareció la definitiva separación.

Sé muy bien que fuí yo quién comenzó con la despedida,
y en realidad todo lo pretendo para el bien de tu vida,
pero sin querer ofenderte he logrado tu desprecio,
me disculpo por aferrarme a entrar en tu espacio.

De mi voz pronunciadas cuatro palabras en mi partida,
resonarán en el eco de la obscuridad y en las paredes
de la soledad convertiéndose en un trueno lograrán
partir el futuro de nuestra separada realidad.

“Que tengas buena vida” he dicho y de corazón lo deseo.

No pretendo agredirte al expresar lo que en mi mente trasiende,
pero sin embargo no quiero reprimir lo que mi corazón siente.

Dejo abierta la puerta que tu cerraste,
para que cuando quieras entrar después,
sin problemas ingresar de nuevo tu logres,
y aunque parecen mis pensamientos confundirse
o quizá hasta contradecirse, no es mi mente
la que lo escribe sino mi corazón agonizante.

Ya puse fin al sufrimiento
de mi corazón mendigante,
y aunque creas que no lo ha sido
mucho rogó por una mísera amistad
que en realidad muy poco otorgó.

Sé de tus problemas personales,
intenté estar ahí para apoyarte,
pero con tu actitud reflejaste
que de mí solo querías alejarte.

Este es mi último pensamiento,
este es mi último llamado,
este es mi último mensaje,
este es mi último adiós.

Adiós Muñequita Ruda, adiós desde hoy, adiós.

}{Mack Asaga}{ <20070709l0133>